En realidad no sabemos lo que tenemos, el creador a dado lo mejor de si en realizar este llano hermoso, sus mejores obras están allí, con ese color del araguaney en marzo y las corocoras en el bajío donde se aglomeran las garzas en diversas especies, los gabanes y los guires haciendo un suceso realmente cautivador.
La majestuosidad del llano se siente en el silencio que emana la vista perpleja al río Sarare, donde se conjugan los pensamientos y se evade la realidad, donde la imaginación vuela al empíreo del creador, sintiendo el suave olor que solo se siente en los mayores pensamientos donde se quiere sentir la presencia del Altísimo.
Que lindo es el llano es fácil poder decir soy del llano, pero en realidad no saber lo que esto significa porque Dios se esmero en realizar lo mejor aquí y para ello necesitamos personas con conciencia que ayuden en la preservación del ecosistema y mantener aun muchas especies en extinción que sin ellas se opacaría el colorido natural de esta inmensidad.
Texto: Nathali Arguello
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